Mi más sincera felicitación a los organizadores y asistentes de las reuniones de cetrería realizadas durante los últimos días de la semana pasada en México.
Sería una necedad negar la expectación que causó la doble convocatoria, sería inapropiado ignorar los comentarios que se sucitaron a raíz de estos hechos. Una vez consumada la fecha me atrevo a romper el silencio y compartir un par de reflexiones.
Al calor de las emociones que emanaron, que lograron encenderse con la pasión que caracteriza a esta comunidad resulta predecible que surgirán ponderaciones para calificar a la mejor organización, la de mayores alcances, la de mayores perspectivas y por ende la que será colocada en la posición antagónica. Es algo inevitable, signo intrínseco de nuestra naturaleza humana.
Es obvio que muchos buscarán colocar todo en una balanza para ver de que lado se inclina más. En ese sentido se pondrá de manifiesto la cantidad de cetreros que acudieron de uno y otro lado, podría concitarse la tecnología utilizada aqui y allá, quizá se haría mención del número de presas cobradas en ambos lugares, ver quien cazó más, evaluar el nivel de cetrería de los asistentes de uno y otro campamento, a los de mayor tradición, a preguntarse a donde asistieron los más veteranos, donde los más campeadores, dónde los de alto vuelo, a donde los que vinieron de más lejos, quien acogió el ave más exótica. Reducir todo, simplificar ambos esfuerzos en una pregunta: CUÁL ESTUVO MEJOR. A muchos todavía la duda flota entorno suyo.
Personalmente tuve el privilegio de estar presente en ambos eventos, tuve la oportunidad de saludar de mano a grandes amigos, de compartir opiniones, de cruzar la charla amena, de sentir el abrazo fraterno. En ambos campamentos tuve la posibilidad de ver los rostros de los cetreros signados por la impaciencia de pisar el terreno de cacería con las aves, de vibrar con el clamor de la presa cobrada, de pulsar el gusto por disfrutar la convivencia, de vivirla la cetrería a cada pulso.
Cada quien juzgará las cosas de acuerdo a su propio criterio, con las nociones de vida propias, con la perspectiva natural que a cada uno pertenece.
Fue así que dos planteamientos similares, y aparentemente disímbolos, apenas fueron separados paradójicamente por unos 4 o 5 kilómetros de distancia.
Dos campamentos con objetivos cercanos, con metas próximas unas de otras, tanto como los caminos de terracería que de manera involuntaria se compartieron; tanto como los terrenos de cacería en donde, sin predecirlo, hicieron juntos cetrería grupos de aquel, este y la otra organización.
Lo que me quedó muy claro fue que el denominador común en ambos sitios no fue diferenciado, la pasión por la cetrería se manifestó con derroche digno de ser admirado.
Vendrán más propuestas de organización, llegarán más invitaciones para asistir a eventos, algunos con fechas iguales, otras veces no, celebraremos con júbilo este gusto por la actividad que da sentido a nuestras vidas, eso es algo que debemos disfrutar con actitud propositiva pero sobre todo con un profundo respeto, tal y como lo hemos hecho durante muchos años.
Que 2007 sea promesa para trabajar, en lo individual o de manera colectiva, con nuevos proyectos en favor de la cetrería. Que logremos con madurez trabajar bajo los acuerdos, pero también de frente a las diferencias y el disenso. Aqui y en cualquier lado HACER de corazón es lo que cuenta.
Comparto con ustedes un breve, muy breve registro gráfico de este episodio reciente de la cetrería mexicana que orgullosamente nos ha tocado vivir.
FELICIDADES A ORGANIZACIONES CETRERAS DEL NORTE, DEL CENTRO Y DEL SUR DEL PAÍS, FELICIDADES A TODOS LOS CETREROS INDEPENDIENTES Y FELICITACIONES POR LAS FIESTAS DE FIN DE AÑO.
Lo mejor para todos ustedes y sus apreciables familias.
Felicitaciones a organizadores y asistentes de ambos eventos
- JAIME MEXICO
- Master
- Mensajes: 1707
- Registrado: 17 Mar 2005, 20:57
- Ubicación: México DF
- Contactar: