El último relato: Cisco, pequeño gran halcón

[Nekira]

El último relato: Cisco, pequeño gran halcón.

No sé muy bien cómo empezar este relato, cuando aún me supera la idea de que mi querida amiga ya no esté a mi lado. Todo fue tan rápido y fugaz que me cuesta creer que no esté en su muda como cada día, mirando al cielo desde su posadero o descansando tranquilamente en su banco.
Cisco era una pájara que nunca había tenido mucho celo en la época de muda. Pero sin saber muy bien porque este año estaba muy encelada. Se notaba en su actitud y sobre todo me di cuenta cuando empezó a piñonear muchas noches, sorprendiéndome sus pequeños piidos mientras veía la tele. Pero jamás me pude imaginar que fuera a poner huevos.

Tenía nueve temporadas en sus espaldas, cientos de aventuras juntas, decenas de momentos en los que estuvo a punto de irse de mi lado. Pero siempre lucho por su vida, siempre salió adelante desde que era un pequeño pollito, la única en nacer de la última nidada de Umbría. La única capaz de romper el cascarón y venir al mundo, convirtiéndose en mí querida compañera. Y un huevo truncó su vida, incapaz de ponerlo por sí misma.

Juanse me decía que Umbría se ponía muy mal cuando iba a poner huevos, pareciendo incluso que se iba a morir. Por eso decidimos que lo mejor era esperar a que la naturaleza siguiera su curso. En un proceso tan delicado, con un pájaro también delicado por su tamaño y metabolismo, ¿cómo saber el límite de tiempo para actuar que te queda o cómo saber si estas actuando demasiado pronto sin dejar que ella sola haga lo que tiene que hacer y complicando las cosas por actuar demasiado rápido?
Decidimos esperar un día, con todas las consecuencias. Cada hora que pasaba sin venir ese huevo me ponía más nerviosa y me pesaba en el corazón. Juanse estaba convencido de que lo pondría. Pero se acabo el día sin novedad… cuando ya caía la noche le puse agua limpia, un trozo de codorniz por si quería comer y una bandeja con arena por si estaba más cómoda allí para poner su huevo. Jamás olvidaré sus ojillos mirando todo lo que hacía con una tranquilidad y ternura que nunca había visto en ella. Me estaba diciendo “gracias por preocuparte por mi”. Y pensé que en esa noche crucial seguro que ponía su huevo y todo saldría bien.

Pero amaneció de nuevo y vi como mi pajarita hacía los últimos intentos por liberarse del que se convirtió en su mal. Poco a poco se le iban sus ya escasas fuerzas y el brillo de la vida se apagaba en la noche de sus ojos… ya no dio tiempo a actuar, cuando vi que se tumbaba en su muda, cuando la cogí dispuesta a llevarla al veterinario, entonces ya era tarde, ya se había ido y prácticamente se murió en mis manos…

Y duele tanto sentir que quizá has fallado a tu compañera, duele tanto pensar que podrías haber hecho algo más… Cosas que siempre piensas, de una manera u otra, pues actúes como actúes al final siempre te puedes arrepentir de las decisiones que has tomado… Pero en realidad no sirve de nada martirizarse, solo sirve para sufrir más.
Es curioso que haya pensado en muchas ocasiones que me hubiera gustado criar con ella como hizo Juanse con Umbría. Y precisamente, un proceso parecido aunque para nada buscado por mi parte, sino que vino de forma natural, se la ha llevado de mi lado.

Cisco era algo más que un pájaro de cetrería para mí y algo más que mi primer pájaro… era más que mi compañera durante sus nueve años de vida. Cisco era mi amiga, mi maestra, era mi libertad, era mi sueño, era mi ilusión... Luche muchísimo por llegar a ella y seguí luchando por ella cuando estuvo a mi lado.
Al principio no fue fácil por muchas cosas. Y ella siempre fue una pájara dura a su manera. Era esquiva y nerviosa. Pero en el campo cambiaba de forma tan radical que hasta yo misma no dejaba de sorprenderme cuando la veía sobre mi puño sosegada. Le gustaba muchísimo el campo, amaba la vida, amaba volar y siempre supe que me agradecía enormemente esos ratos en el campo, sobre todo los ratos de sosiego después de la lección, observando desde un rincón el mundo, mirando al teatro de la vida… Nunca olvidaré el brillo de sus ojos mientras oteaba el campo…

Por ella, acabe sacrificando muchas cosas de mi vida para ir todas las tardes de la temporada al campo a sacar a mi pajarilla y a disfrutar con ella. Porque sabía que se lo merecía y sabía que le gustaba tanto o más que a mí. Hemos volado en días tan dispares… con viento, con lluvia, con frío, con nieve, con calor… Hemos visto juntas tantos atardeceres, tantas cosas de las que hemos sido afortunados testigos… Hay tantísimos recuerdos, tantos lances hermosos, tantos picados y persecuciones increíbles en pos de las presas, tantas presas valerosas… tantos momentos y anécdotas…

Juntas logramos todo lo que yo podía desear tener de la cetrería. Ella me enseño en gran parte este arte, me hizo mejor persona, me enseño a mirar a mí alrededor con otros ojos, a ver cosas que para la mayoría de las personas pasan desapercibidas. Me enseño a amar aún más la vida y a tener mayor sensibilidad, a tener más paciencia. Me dejo ver a través de sus ojos, me dejo volar en sus alas, sentir el viento… Me hizo disfrutar de los lances, me hizo sentir lo que es ver a tu pájaro ganarse el sustento cazando sus presas reales en el campo sin necesidad de aportarle presas cautivas… Y sobre todo cambio mi vida para siempre.

Era un alma gemela que disfrutaba del campo con la misma afición que yo tenía. Podía pasar horas con ella sobre mi puño, echa una bolita y con su pata recogida mientras observábamos el páramo. E igualmente descubrí hace años que el único sitio donde estaba tranquila en casa era encima de una puerta semiabierta, y allí podía pasar horas en mi habitación del mismo modo que lo hacía sobre mi puño después de volar. Nunca olvidaré las tardes frías de invierno con mi compañera observándome tranquila desde la puerta después de volver de volar.

Cisco, hija de Umbría, era el pollito que crió el que ha sido mi maestro, mi mejor compañero y amigo y mi pareja. Y siempre he pensado que ella ha sido en gran medida la que hizo posible que nuestros caminos se acabaran uniendo de esta manera.
Por todo esto y por más, Cisco ha sido tan importante para mí. Sus defectos me enseñaron tanto como sus virtudes me hicieron maravillarme de una forma que nunca en mi vida hubiera imaginado.

Cómo voy a echar de menos a mi compañera, que se ha ido tan inesperadamente de mi lado… yo que pensaba que nos quedaban otros cuantos años por vivir juntas…
Algunos la conocisteis, muchos os ilusionasteis, disfrutando y sufriendo mientras leíais sus andanzas en aquella mágica temporada que publicamos en nuestro libro Juanse y yo. Por eso he querido compartir con vosotros mi pena, que es la pena por la que todos pasamos alguna vez y que solo quienes tratamos con estas aves de esta manera llegamos a comprender. Sé que mi pena siempre estará hay en un resquicio de mi alma, como una herida que nunca se acabará de cerrar, pero algún día casi toda se habrá transformado en la alegría y agradecimiento de saber que he tenido la inmensa fortuna de tener una compañera tan especial. Cisco, la última hija de Umbría y el fin de un legado.

Ahora descansa en paz en el que siempre fue su campo, con su madre y su padre a su lado. Y sus almas vuelan juntas sostenidas por el viento que llegó repentino cuando por fin reposaron sus restos en la tierra. Fue un momento mágico, casi pareció que volaban de nuevo sobre nuestras cabezas y nos miraban desde las alturas…

Gracias por siempre amiga mía, jamás te olvidaré pues siempre volarás en mi corazón…
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Un pequeño homenaje que le ha hecho Juanse en forma de video:

https://www.youtube.com/watch?v=9ufXsbnjZQE

[pepeibiza]

Joder, cuando he visto que habias escrito me alegre,iba a escribite para decirtelo,pero mira por donde he empezado a leer,y se me han quitado las ganas de todo,no puedo decirte mucho mas,lo siento,suerte con el proximo,porque seguro que lo habra,un saludo.

[Juanse]

Claro que lo habrá pepe......... de echo ya esta todo hablado.

Un pequeño Falco adornara ahora su puño y el será el encargado de llenar ahora sus momentos de soledad en el campo.

Su nombre es "PINCEL""...........


Gracias por contestar compañero.

Un abrazo.

Juanse.

[pepeibiza]

va a volar el alcotan???

[Juanse]

Por supuesto pepe, el Pincel sera ahora su pajaro y se que difrutaran muchisimo uno del otro...... y yo difrutare mas si cave viendolo.

La pena y el dolor por la perdida siempre estara hay como bien dice Nekira..... pero como digo en el video, esto no es mas que el fin del comienzo y quedan grandes cosas por añadir al libro de la vida de esta gran cetrera..........

Ahora volara en las alas de guadaña..............


Un abrazo.

Juanse.

[rossifumi]

-Joder,perdon,pero me has dejado con los pelos de punta co tu relato,se nota la union tan grande que teniais,los que pasamos dias,años con ellos sabemos la gran amistad que nos une,y que el dia que se rompe acabmos vacios por dentro,saludos y animos

[Nekira]

Gracias compañeros.
Hay que quedarse con los buenos momentos que pasamos con ellos y seguir adelante.

El próximo como dice Juanse será Pincel el alcotán, ya que con el trabajo y teniendo la gavilana él apenas puede volarle y es un pájaro que merece la pena, veremos como se me da...

Saludos

[Bea_18]

Nekira, mucho ánimo! aunque sé que eres muy fuerte!!!! Ahora a disfrutar de tu nuevo compañero y a sacar todo el potencial que tiene, que seguro que lo harás de maravilla!!
Y el vídeo, precioso...

[SACRE82]

Hace años que no escribo en el foro pero esta vez no podía leer sin mas...Lidia, tal vez ya ni me recuerdes,antes hablábamos bastante pero de esto hace años ya, pero te entiendo perfectamente porque me paso exactamente lo mismo con mi hembra de azor, he leído y sentido cada palabra que escribías porque me sentía reviviendo el pasado...ese pasado que ya no volverá y que golpeo mi vida hasta el extremo de que desde entonces no he vuelto a volar mas, algún dia cuando me encuentre con fuerzas lo retomare... No hagas como yo y coge fuerza desde ya y sal al campo a volar, a respirar cada brizna de aire, a vivir como solo un cetrero sabe hacerlo, porque ese aire será tu libertad y cuando pasen los años sabras que hiciste lo correcto, que la vida sigue pero nadie podrá robarte ya los instantes vividos...mucha suerte cetrera, vive como Cisco te enseño. Un abrazo

[Nekira]

Gracias por tus palabras Jesus. Si recuerdo cuando charlábamos, de tu azora y de mi cernicalilla, hace unos años pero me acuerdo.
Me he acostumbrado tanto a tener uno de estos pájaros tan increíbles a mi lado que me resulta imposible pensar en dejarlo ahora. Es realmente algo que me apasiona a pesar de las trabas, de los disgustos,etc.
A Pincel la verdad es que le tengo mucho cariño y creo que llenará mucho del vacío que siento. Si pudiera ya lo tendría en casa, pero esta mudando y prefiero dejarlo tranquilo hasta que llegue el momento de volver al campo a volar.
Una pena lo de tu azora, lo siento, y sobre todo que dejaras la cetrería aparcada. Pero seguro que lo retomaras en cuanto encuentres el momento, porque en tus palabras se aprecia que tu corazón sigue siendo cetrero. Espero que sea pronto.
Un abrazo.