COMPAÑERO MANUEL:
EN DOCUMENTO ANEXO ESTA LA CLASIFICACIÓN ADEMAS DE VARIOS LINK DE ENLACE Y FUENTES DIVERSAS.
CITO:Hola José Luis he movido montañas buscando información de subespecies en guías de rapaces y he contactado con compañeros ornitólogos en Chicago, solo me han confirmado lo que comenta nuestro compañero gandhi solo tres razas y ninguna subespecie.
ME GUSTARIA PREGUNTARLES SI TIENEN LA IDEA CLARA DE LAS JERAQUIAS EN LA CLASIFICACIÓN DE UN ORGANISMO POR EL COMENTARIO ANTERIOR; PRIMERO TENEMOS:
EN ORDEN ASCENDENTE DE MENOR A MAYOR
RAZA (EN RELACIÓN AL COMENTARIO DE MANUEL)
SUBESPECIE
ESPECIE
GENERO
FAMILIA
ORDEN
CLASE
PHILUM
REINO
DOMINIO
DONDE LA SUBESPECIE:
En biología se denomina subespecie a cada uno de los grupos en que se dividen las especies, y que se componen de individuos que, además de los caracteres propios de la misma, tienen en común otros caracteres morfológicos(fenotipos) por los cuales se asemejan entre sí y se distinguen de los de las demás subespecies. Desde el punto de vista estrictamente sistemático o de la taxonomía, es la categoría taxonómica comprendida entre la especie y la raza.
La subespecie es una parte de la especie formada por una o más poblaciones, poco diferenciadas y con una distribución regional concreta. Esta definición incluye las razas geográficas de muchos autores ('Rassenkreis'). Sin embargo, no está muy clara la línea de separación entre los conceptos de raza y subespecie, pues ambos taxones mantienen las características propias de la especie, es decir, que parejas de individuos de distintas subespecies o razas (pero de la misma especie) se pueden emparentar y producir descendencia viable y fértil. Además, sólo se suelen diferenciar en caracteres externos menores aunque reconocibles y regularmente presentes. El término raza se utiliza con más frecuencia fuera del ámbito científico, por lo que, en taxonomía, sólo se emplea (por tradición) para la distinción morfológica en un número muy limitado de especies, esencialmente los seres humanos y los animales domésticos.
RAZA:
El concepto de raza se desarrolló durante la segunda mitad del siglo XIX cuando A. De Candolle recoge al término, ya antiguo en los trabajos de horticultura, en sus Leyes de Nomenclatura (1867). De Candolle estableció unas categorías infraespecíficas en las especies cultivadas, semejantes a las que tenían las especies silvestres. Así, la raza (= proles, 'stirps') la equiparó a la subespecie y la subraza (subproles) a la variedad. A finales del siglo XIX y comienzos del [siglo XX]] aparecieron una serie de floras donde el empleo de raza como categoría taxonómica es casi constante y con sentidos diversos. Georges Rouy (1851-1924) opina que las razas (= 'forme') tienen unos caracteres cuantitativos constantes y están sometidas a un aislamiento estacional, altitudinal, geográfico, edáfico, etc.; por ello situó esta categoría, igual que hicieron P. Ascherson, P. Graebner y H. Engler, entre la subespecie y la variedad. Este concepto de raza se emplea por algunos autores posteriores para definir subespecies. J. Briquet utilizó el término raza como sinónimo de la variedad en las especies cultivadas, y G. Sampaio como categoría intermedia entre la especie y la variedad. Ante el empleo de raza tanto para las plantas cultivadas como para las silvestres, el Congreso Internacional de Botánica de 1905, celebrado en Viena, eliminó de las primitivas Leyes de Nomenclatura de De Candolle el artículo referente a las variaciones de las plantas cultivadas, desaconsejando el empleo de raza y subraza como categorías taxonómicas.
La clasificación científica se refiere a disciplina por la cual los biólogos agrupan y categorizan a los organismos (sean especies extintas o vivas) y a sus diferentes conjuntos (taxones).
La clasificación científica es una de las tareas de la biología sistemática y, más en particular, de la taxonomía biológica, que no sólo admite una jerarquización de características y funciones (taxonomía), sino también permite establecer un esquema de parentescos, similitudes y relaciones (sistemática) entre los diferentes organismos.
La utilidad principal de la clasificación es que en un nivel científico haya un consenso general y casi universal para establecer un orden esquemático sobre la enorme diversidad de organismos.
La clasificación moderna tiene sus raíces en el sistema de Carlos Linneo (1753), que propuso la clasificación jerárquica de las especies según sus características físicas compartidas y normalizó su denominación. Pero también Linneo propuso la fórmula binominal consistente en el uso de dos palabras para asignar un nombre único para cada especie: la primera es el nómbre del género y la segunda es el epíteto específico; de esta forma, la combinación de ambas designa a la especie como si ésta tuviera "nombre y apellido".
Los taxones (grupos de la clasificación) están sujetos a una permanente revisión para mejorar la consistencia con el principio de la descendencia común, que desde Charles Darwin es la base del agrupamiento. La sistemática molecular, que utiliza análisis de ADN genómico, ha conducido a muchas modificaciones recientes y lo seguirá haciendo.
Un ejemplo de la renovación de la clasificación lo tenemos en el nivel más básico. Robert Whittaker venía reconociendo la existencia de cinco reinos, uno procariótico (Monera), y cuatro eucarióticos (Protista, Fungi, Animalia y Plantae). Ahora se distinguen dos dominios, Prokaryota, dividido en dos reinos, Bacteria y Archaea, y (Eukarya), dividido éste a su vez en los cuatro reinos arriba ennumerados.
Filogenéticamente hablando, cabe aclarar que el primero en separarse del árbol evolutivo fue el reino Bacteria, quedando más cercanos filogenéticamente Archaea con Eukarya
Código Internacional de Nomenclatura Zoológica
El Código Internacional de Nomenclatura Zoológica (conocido por sus siglas en inglés: ICZN) tiene como propósito fundamental proporcionar la máxima universalidad y continuidad de los nombres científicos de los animales compatibles con la libertad de los científicos para clasificar los animales según sus criterios taxonómicos (ICZN, 1999, Introducción). El Código reglamenta los nombres de los taxones de animales (reino Animalia) y de otros clados de eucariotas tradicionalmente considerados "protozoos".
El Código consta de Artículos (que son obligatorios) y Recomendaciones. Los Artículos se diseñaron para permitir a los zoólogos llegar a los nombres de los taxones que sean correctos en circunstancias taxonómicas concretas. El uso del Código permite a un zoólogo determinar el nombre válido de cualquier taxón al que pertenezca un animal en cualquier categoría de las jerarquías especie, género y familia (incluyendo subespecie, subgénero y categorías del nivel familia tales como subfamilia y tribu). El Código no regula enteramente los nombres de los taxones por encima del nivel familia (orden, clase, phylum) y no proporcio
Nombres binomiales y trinomiales
Los nombres de los taxones de nivel especie son binominales para la especie Buteo jamaicensis (Gmelin) 1788 Syst.Nat. 1 pt1 p.266 y trinominales para la subespecie, Buteo jamaicensis alascensis Grinnell 1909 Univ.Calif.Pub.Zool. 5 p.211
Buteo jamaicensis borealis (Gmelin) 1788 Syst.Nat. 1 pt1 p.266 es decir, formados por dos y tres palabras respectivamente.
Para los nombres de las especies, de las dos palabras citadas, la primera corresponde al nombre del género al que pertenece y se escribe siempre con la inicial en mayúscula; la segunda palabra es el nombre específico y debe escribirse enteramente en minúscula y debe concordar gramaticalmente con el nombre genérico. Así, en Mantis religiosa, Mantis es el nombre genérico, religiosa el nombre específico y el binomio Mantis religiosa es el "nombre científico", otorgado a cierta especie de insecto del orden Mantodea.
En el nombre científico asignado a las especies, el nombre específico nunca debe ir aislado del genérico ya que carece de identidad propia y puede coincidir en especies diferentes. Si se ha citado previamente el nombre completo y no cabe ninguna duda de a qué género se refiere, el nombre del género puede abreviarse a su inicial (M. religiosa).
Si una especie presenta dos o más subespecies, se formará un trinomio. Por ejemplo, Felis silvestris presenta numerosas subespecies, entre ellas Felis silvestris silvestris, el gato montés europeo y Felis silvestris catus, el gato doméstico. Nótese que si nos referimos en concreto al gato montés, debemos ustilizar el trinomen Felis silvestris silvestris, que significa Felis silvestris subespecie silvestris, por lo que repetir la palabra silvestris no es una redundancia.
OTRO EJEMPLO
Buteo jamaicensis (Gmelin) 1788 Syst.Nat. 1 pt1 p.266
Buteo jamaicensis alascensis Grinnell 1909 Univ.Calif.Pub.Zool. 5 p.211
Buteo jamaicensis borealis (Gmelin) 1788 Syst.Nat. 1 pt1 p.266
Cuando se hace referencia a un taxón del nivel especie se recomienda indicar, tras el binomio o el trinomio, el nombre del autor (sin abreviar) que lo describió, y el año de su publicación, separados por una coma. Por ejemplo, Sparedrus lencinae Vázquez, 1988.
Si el descriptor de una especie la colocó en un género diferente del que se le asigna actualmente, su nombre y la fecha deben ir entre paréntesis. Así, el nombre científico de la tórtola común debe escribirse Streptopelia turtur (Linnaeus, 1758); con este paréntesis se indica que la especie citada no fue originalmente descrita dentro del género Streptopelia, en el cual actualmente se halla; en efecto, Linneo colocó esta especie en el género Columba cuando la describió.
TIPOS
Según el Codigo Internacional de Nomenclatura Zoológica todo taxón de nivel especie debe tener al menos un ejemplar del mismo que sirva como elemento de referencia y comparación para otros zoólogos, que será el tipo o ejemplar típico de la especie o subespecie. El conjunto de ejemplares sobre la que se basa la descripción original del taxón se llama serie tipo o serie típica. Los tipos pueden ser ejemplares de cualquier sexo o fase de desarrollo (huevo, larva, adulto), completos o parciales, fósiles o no y, hasta 1930 una muestra de la obra de un animal (fósil o no), como una agalla o un rastro (icnofósil).
El Código reconoce los siguientes tipos:
* Sintipos. Todos los ejemplares de la serie tipo.
* Holotipo. Un ejemplar único, elegido entre los sintipos y designado explícitamente.
* Alotipo. Espécimen designado desde la serie tipo que es del sexo opuesto al holotipo.
* Paratipos. El resto de ejemplares de la serie tipo, excluido el holotipo.
* Lectotipo. Si el autor de la descripción original no eligió un holotipo (práctica común hasta mediados de los anos 40 ó 50 del siglo XX, cualquier autor posterior debe designar explícitamente de entre los sintipos un ejemplar único que se convierte en el ejempar típico de la especie, y que recibe el nombre de Lectotipo. Equivale al holotipo cuando no hubo desiganción original.
* Paralectotipos. El resto de ejemplares de la serie tipo, excluido el lectotipo. Equivalen a los paratipos cuando no hubo desiganción original.
* Neotipo. Un único ejemplar, designado explícitamente que sustituye al holotipo, al lectotipo o los sintipos perdidos. No tienen validez las designaciones de neotipos para taxones ampliamente conocidos y sin problemas taxonómicos que las justifiquen.
Todos los tipos deben rotularse adecuadamente con una etiqueta conspicua y custodiarse de forma especial por las personas o instituciones que los amparen, permitiendo su estudio a todos los zoólogos, ya que son patrimonio de la Zoología.
ESPERO LES SEA ÚTIL LA INFORMACIÓN ANTERIOR.
SU AMIGO:
BIÓLOGO JOSE LUIS ROMERO SUAREZ




