2. Nuestra relación con las aves.
Las aves han servido a los seres humanos de diversos modos, principalmente como alimento, pero también han sido usadas para recreación, decoración y como medio de comunicación.
Las palomas han tenido un papel en la historia humana tanto como mensajeras y como alimento. En Babilonia existía el correo por medio de palomas; las cuales también fueron empleadas como mensajeras por los egipcios. Esta práctica fue generalizada hasta la llegada del telégrafo y el teléfono, en el siglo XIX.
La tenencia de halcones como deporte se originó hace 4000 años en la Europa Medieval y en las Cruzadas se introdujeron técnicas islámicas para su tenencia. Este deporte se realiza aún en ciertos países.
El uso de las plumas como adorno se extendió en América del Norte, América del Sur, África y en el Pacífico Oeste hace algunos siglos. Las plumas estuvieron presentes en trajes de reyes hawaianos y en obras artísticas de Mayas y Aztecas.
La admiración por las formas, los colores y los cantos se ven reflejados en aves que se han domesticado para este fin; por ejemplo, los canarios, pavos reales y cisnes. Desafortunadamente, el gusto por disfrutar de la presencia de las aves ha provocado que muchas especies silvestres sean destinadas a una vida estéril tras los barrotes de una pequeña jaula. Sin embargo, actualmente, el deseo de disfrutar de la belleza de las aves hace que cada vez más personas se conviertan en observadoras de aves y se acostumbren a frecuentar áreas silvestres protegidas para avistarlas.
Para muchas personas, determinadas aves son plagas o pestes, como las que dañan las plantaciones. Pericos y tortolitas son consideradas plagas porque invaden plantaciones de granos y las dañan. Otras aves se aprovechan del abundante alimento de un estanque con peces; este es el caso del martín pescador, las garcetas azules y el gavilán pescador. Por supuesto, si las aves fueran capaces de opinar, seguro dirían que la peor plaga es el ser humano.
Actualmente, en todo el mundo podemos encontrarnos con personas que se dedican a la Ornitología, el estudio científico de las aves. Avances grandes en el estudio de las aves ocurrieron a partir del siglo XVIII.
Las personas con afición por la observación de las aves, como vosotros (cetreros), tienen un interés naturalista genuino por estos animales. A partir de ya, os invitamos a ampliar sus conocimientos sobre estas maravillas de la naturaleza.
Y así reconocer tanto a nuestras queridas Rapaces como a sus potenciales presas cinegéticas.
